Conociendo al equipo: Javier Añón, Jubilado de Inasus S.L.

Conociendo al equipo: Javier Añón, Jubilado de Inasus S.L.

Después de toda una vida (¡46 años!) de trayectoria profesional en Inasus, ha llegado el momento de la merecida jubilación. Si echas la vista atrás, ¿qué recuerdas de tus inicios en la empresa?

A pesar del tiempo transcurrido, recuerdo perfectamente los inicios. En el año 1977, cuando todavía estaba en el colegio, al finalizar el curso, mi madre me dijo que en Lalín buscaban personal para trabajar en el aluminio, me presenté en el pequeño taller que tenía Inasus y ya no conocí otra empresa. Aquellos tiempos no tenían nada que ver con los de hoy, éramos una familia, trabajando en unas instalaciones muy humildes en las que los medios eran escasos. Aún así, a pesar de la dureza del trabajo de entonces, tengo un buen recuerdo, pues trabajar en Inasus me abrió un mundo de posibilidades que hasta ese momento no tenía. Siempre le estaré agradecido a Moncho Cuiña por darme la oportunidad en un momento difícil.

¿Cómo viviste desde dentro la evolución y el crecimiento de la empresa desde entonces hasta el día de hoy?

La ampliación de la nave de A Corredoira fue el primer paso que recuerdo del crecimiento de Inasus y, más tarde, el cambio a las instalaciones del Polígono Lalín 2000 creo que fue el más importante. Pasamos de trabajar con muy pocos recursos a hacerlo con muchas facilidades, en condiciones de total seguridad y comodidad. Si algo ha caracterizado siempre a esta empresa es su apuesta por la prevención de riesgos laborales y el buen trato a los empleados. Hoy, veo a Inasus con orgullo y con optimismo, deseando que pueda continuar por la misma senda, creando empleo y riqueza en Lalín y haciendo proyectos innovadores por todo el mundo.

Si tuvieras que quedarte con uno, ¿Cuál ha sido el proyecto más especial de todos en los que has participado durante este tiempo?

Sin duda creo que el proyecto más importante de la historia de Inasus es el Aeropuerto de Heathrow, pues supuso un antes y un después. Fue un desafío técnico extraordinario, en el extranjero, sin el que no se podría entender el Inasus del presente.

Si tuvieras que dirigirte al equipo actual de Inasus para darle un consejo, ¿Qué le dirías?

El mensaje sería que trabajen con responsabilidad y compromiso, pensando siempre que si a la empresa le va bien a ellos también les irá bien. Además, me gustaría darles las gracias a todos: compañeros, encargados, técnicos y dirección, por su ayuda y por haber contribuido a que mi carrera en Inasus pudiera ser tan positiva. Y mirando al futuro, les deseo suerte tanto a todos ellos como a la empresa y a las personas que tienen la responsabilidad de dirigirla en la actualidad.

¿Y llegado este momento, después de tantos años de trabajo y esfuerzo, como afrontas la nueva etapa vital que supone la jubilación?

Con muchas ganas, ya que, aunque siempre me he sentido bien y con energía para trabajar, creo que después de tantos años ya me merecía un descanso, tener la posibilidad de dedicar el tiempo que la familia se merece y aprovechar para hacer deporte, que es mi gran pasión.

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